Esta sección está dedica a presentar a los artistas vinculados al fenómeno de la Figuración Postconceptual a través de una selección representativa de su obra, acompañada de una introducción a sus claves conceptuales y estéticas, accesible a través de un buscador alfabético. Esta sección se encuentra en desarrollo y próximamente se incorporaran nuevos autores +

 

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ÁNGEL MATEO CHARRIS


Cartagena 1962

Reside y trabaja en Cartagena

 

 

 

 

Vinculado a la pintura neometafísica desde su participación en la exposición El retorno del hijo pródigo. Vinculado a la galería My Name’s Lolita Art. Desde 1995 dirige desde Cartagena el proyecto La Naval, junto a Gonzalo Sicre y el arquitecto Martín Lejárraga.

 

Ángel Mateo Charris recrea en sus imágenes pictóricas y literarias mundos paralelos donde reflexiona sobre los temas que le apasionan. Ensayos visuales que recrea en espacios imaginarios, como Charrilandia o República de Cartagena, articulados mediante la metáfora del viaje a través de paisajes exóticos, desérticos o polares.

 

Charris cultiva una estética basada en los mestizajes paradójicos donde predominan claves procedentes de la metafísica hopperiana, el surrealismo más hilarante o el apropiacionismo pop. Su complejo repertorio iconográfico posee un carácter postmoderno, como consecuencia de la voracidad cultural y su interés por la imagen, culta o popular, procedente de cualquier fuente cinematográfica, literaria, artística o mediática.

 

La construcción de sus cuadros está basada en la técnica del collage y la poética de los aforismos. Mediante el ensamblaje digital de conceptos y elementos visuales logra crear simulacros de realidad en las provocadoras imágenes que presenta en su obra. La influencia de Ramón Gómez de la Serna se manifiesta en el empleo de una metodología próxima a la desarrollada en sus greguerías, con la intención de expresar a través de la unión del humor y la metáfora pensamientos de cualquier naturaleza. En sus cuadros experimenta registros tan diversos como la ironía, la emoción, el enigma, el ingenio, lo sensorial, la lírica o el costumbrismo.

 

Charris dedica en sus temáticas una especial atención a la reflexión sobre las derivas del arte del siglo XX y a determinados asuntos de calado político, como: el poder, la guerra, el colonialismo o la apropiación cultural. La admiración y la ironía están presentes en la realización de sus homenajes y citas a los referentes artísticos que mayor influencia han ejercido en su desarrollo creativo. Unas claves que el artista señala a través de la descontextualización de elementos de sus propias iconografías. Entre todos ellos destaca Edward Hopper y su mundo, con el que ha manifestado una consonancia espiritual. Pero también son objeto de su pintura la idolatría y el olvido en torno a la práctica artística y su historia, especialmente en asuntos relacionadas con la actualidad del mercado del arte y sus rituales.

 

Entre sus referentes pictóricos destacan:Edward Hopper, James Rosenquist, Salvador Dalí, Magritte, Leon Spillaert, Walt Disney o Herge.

 

 

Bibliografía consultada: Levin, Gail, “El mundo de Ángel Mateo Charris”, Huici, Fernando, “El hombre que sabía demasiado”, Bonet, Juan Manuel, “Arte y literatura: el caso Charris”, en el catálogo de la exposición Charris, Valencia, IVAM, 1999. Bonet, Juan Manuel, “Charrilandia (breve guía)”, en el catálogo de la exposición Charris se va a Columela. Charris go to Lolita, Madrid-Valencia, Galería My Name’s Lolita-Galería Columela, 1991

 

 

Bibliografía consultada: Levin, Gail, “El mundo de Ángel Mateo Charris”, Huici, Fernando, “El hombre que sabía demasiado”, Bonet, Juan Manuel, “Arte y literatura: el caso Charris”, en el catálogo de la exposición Charris, Valencia, IVAM, 1999. Bonet, Juan Manuel, “Charrilandia (breve guía)”, en el catálogo de la exposición Charris se va a Columela. Charris go to Lolita, Madrid-Valencia, Galería My Name’s Lolita-Galería Columela, 1991

 

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